Saber más de la Microbiota Intestinal y Ayuno Intermitente siempre es buena idea…
Hablar de la Flora Intestinal o Microbiota suena a clase de biología, puede hacernos pensar que eso no es un tema interesante o que quizás lo sea para alguien que tenga alguna enfermedad específica…
Pero espera, tengas o no esa creencia, la Microbiota está involucrada en casi todos los aspectos de tu salud y te importa más de lo que crees, ahora entenderás por qué…
¿Qué es la Microbiota?
Tú cuerpo cuenta con billones de pequeños organismos como bacterias, hongos, virus y otros microbios que se distribuyen por todo el cuerpo y que forman un ecosistema de microorganismos denominado Microbioma Intestinal Humano.
La Microbiota o Flora bacteriana es la comunidad de microorganismos que ocupa un hábitat específico; mientras que el término de microbioma se refiere a la microbiota y a la función que cumple dentro de dicho entorno.
Los humanos adquirimos la microbiota al momento de nacer y su composición dependerá de la vía de nacimiento ya sea vaginal o cesárea; posteriormente, su maduración estará relacionada con el tipo de alimentación, el sexo, el índice de masa corporal, así como del nivel de actividad física. Fuente
Las alteraciones cuantitativas o cualitativas en la Microbiota dan como resultado una Disbiosis, una especie de desbalance o pérdida de equilibrio entre los microorganismos que puede suceder por factores como los antibióticos, alimentación con exceso de alimentos ultra procesados, tabaco, alcohol, sedentarismo, estrés crónico, falta de sueño de calidad, baja diversidad de alimentos que consumimos, etc.
Una Disbiosis es grave en la medida en que puede generar mayor riesgo de enfermedades crónicas, obesidad, etc.
La Microbiota puede ser intestinal, pero también hay flora bacteriana en la piel, en la mucosa de la nariz y boca, en el estómago por ejemplo.
Cuando nos referimos a la Flora Intestinal (FI) o Microbiota Intestinal, hacemos referencia a esa comunidad de diferentes microorganismos ubicados en el intestino, que es el lugar con mayor concentración en el cuerpo.
Esto hace referencia mayormente al intestino grueso y al colon, ya que tienen las mejores condiciones que necesitan esos microorganismos para vivir y reproducirse; pero también los encuentras en menor medida en el intestino delgado.
Cada persona tiene una FI única, ninguna es igual a otra, la composición varía, esto es lo que lleva a profundizar los estudios al respecto ya que no se pudo identificar aún cómo es la composición de una FI ideal.
Una Microbiota intestinal en buen estado ayuda a mantener la integridad de la barrera mucosa, proporcionar nutrientes como vitaminas o proteger contra patógenos. Además, la interacción entre la microbiota comensal y el sistema inmunitario de las mucosas es crucial para una función inmunitaria adecuada. Fuente
Ayuno intermitente y Flora intestinal
En un estudio realizado a personas que practican Ramadán y por lo tanto se pone en práctica un ayuno intermitente, se pudo observar que el ayuno contribuye a una variabilidad bacteriana, disminuye el SIBO, además contribuye a qué las bacterias produzcan más acetato, lactato y otros ácidos de cadena corta que mejoran la salud metabólica.
Aunque no es una práctica de ayuno y la restricción de alimentos es de día, sin comida y sin agua (condiciones que no son recomendadas para un ayuno normal), el estudio arroja datos muy valiosos.
Hacer referencia a una FI en buenas condiciones implica tener presente nuestra alimentación, esto es ya que alimentos como los carbohidratos, si se consumen en exceso, pueden afectarla en la medida en que sirven muchas veces para alimentar a las bacterias y demás microorganismos que se reproducen significativamente, dando lugar a un desbalance en el equilibrio necesario entre los microorganismos.
Igualmente, una menor variedad de cepas bacterianas producto de una mala alimentación también es un riesgo y puede ocasionar Disbiosis.
Es igualmente importante evitar el SIBO, sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado, para ello prescindir de una dieta basada solo en carbohidratos, es clave; además, tener un buen sistema inmune es de mucha utilidad ya que contribuirá como una especie de regulador del equilibrio entre las bacterias buenas y malas de tu organismo.
Evitar el SIBO es esencial en la prevención de patologías más graves como la permeabilidad intestinal, situación en la que la barrera que debe filtrar lo que puede o no ingresar a tu torrente sanguíneo, se ve afectada y deja pasar toxinas perjudiciales a la sangre. Esa permeabilidad intestinal es responsable del envejecimiento prematuro, mala absorción de nutrientes, enfermedades autoinmunes, alergias, inflamación sistémica, etc.
Es por eso que, para reparar la Microbiota Intestinal se recomienda reducir el consumo de alimentos con alto índice glucémico como dulces, postres, pan, pastas, etc. y aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra, grasas saludables y el adecuado consumo de proteínas.
Aquí es donde el Ayuno Intermitente se hace presente como una herramienta útil para regular esos niveles de azúcar en la sangre, gracias a que después de ciertas horas de ayuno, se puede hacer uso de la glucosa almacenada como fuente de energía hasta agotar reservas y pasar a otra fuente energética más eficiente como los cuerpos cetónicos.
Por otro lado, el ayuno es un buen aliado cuando se trata del sistema inmune, esto gracias a la autofagia y demás procesos que contribuyen en su fortalecimiento. De ello se deriva que un buen sistema inmunitario, puede a su vez ser un buen regulador de la Microbiota intestinal, evitando que se reproduzcan en exceso aquellos microorganismos que pueden causar enfermedad.
Sin embargo, es clave mantener una flora intestinal adecuada, sino el Sistema Inmunitario se ve obligado a estar en alerta y actuar de forma constante, lo que podría ocasionar un desgaste del mismo.
Otro dato interesante es que el intestino y la FI son responsables de producir el 90% de la serotonina del cuerpo, por lo cual si algo no está bien en esa parte del cuerpo afecta la cantidad de serotonina y con ello ocasiona cambios en el estado de ánimo, se hace más difícil relajarse, interfiere para una buena digestión, puede ocasionar mayor estrés, etc.
Todo ello también tendrá relación directa en el vínculo de la FI con el cerebro, no por nada se dice que el intestino es el segundo cerebro. Aquí el ayuno también cumple un rol importante, descúbrelo aquí.
Y no podemos dejar de mencionar que con la aparición de los antibióticos de amplio alcance la Microbiota Intestinal se ve afectada luego de infecciones virales ya que el consumo de ese tipo de medicamentos no individualiza la bacteria que debe eliminar, sino que ataca a un conjunto de ellas ya sean buenas o malas, provocando el no deseado desequilibrio en la FI. De igual manera sucede con otros medicamentos de uso común.
En ese aspecto el AI como una forma de prevenir enfermedades, es una contribución importante para una Microbiota intestinal en buenas condiciones, evitando que la persona deba necesitar y por ende recurrir a los medicamentos. (No significa que el ayuno reemplace al medicamento, sino que evita el desarrollo de enfermedad por lo que no sería necesario consumir medicamentos si la misma no existe). Fuente
¿Cómo tener una Flora Intestinal en buen estado?
Cómo mencionamos al principio del post, la FI cumple funciones relevantes para una buena salud y también colabora en la producción de vitaminas K, B12, aumenta la biodisponibilidad (mejor capacidad de asimilación) y absorción de sustancias muy importante para asimilar los nutrientes que consumimos diariamente, etc., por lo que es necesario cuidarla.
Además de una buena alimentación, para mantener una buena FI podemos consumir probióticos que aportan nuevas cepas bacterianas y contribuye a una mayor variabilidad de bacterias en la FI, muy beneficiosas en la medida en que contribuyen a lograr equilibrio adecuado para una FI y mucosa intestinal en buenas condiciones.
Aquí debemos considerar que hay diferentes tipos de probióticos y va a depender de cada persona en particular el tipo de probióticos que necesite y deba ingerir. Seguramente te contamos más detalles en un próximo post.
De igual manera, si consumimos prebióticos, ya sea de alimentos o de suplementos, es una buena forma de mejorar la FI ya que estaríamos alimentando los microorganismos buenos y colaborando en su reproducción.
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