Metabolismo Rápido y Metabolismo Lento ¿Cuál es Mejor?

Puede que alguna vez hayas escuchado la frase de que tal persona era delgada gracias a que tiene un metabolismo rápido y no asimila todo lo que come y por lo tanto no engorda… Entonces surge la duda “Metabolismo Rápido y Metabolismo Lento ¿Cuál es Mejor?”…

Algo así como que es una bendición tener ese tipo de metabolismo y un deseo de muchos para mantenerse esbeltos sin tanto esfuerzo ni limitaciones.

Por el contrario, quienes no tuvieron esa suerte y su metabolismo es lento, pareciera que con “solo mirar la comida” ya engordan…

Pero, desde ya adelantamos que la realidad no es así, comer demás y comer mal, jamás va a ser una buena opción, el estilo de vida basado en una buena alimentación, ejercicio regular y descanso adecuado siempre es esencial.

Y en cuanto al metabolismo, vamos a ver qué tanto importa que sea rápido o lento y cómo influye en nuestro peso y en nuestra salud…

¿Qué es el Metabolismo?

El metabolismo se refiere a todos los procesos físicos y químicos del cuerpo que convierten o usan energía, tales como: respiración, circulación sanguínea, regulación de la temperatura corporal, contracción muscular, digestión de alimentos y nutrientes, eliminación de los desechos a través de la orina y de las heces, funcionamiento del cerebro y los nervios. Fuente

Otra forma de describirlo nos indica que el metabolismo es el proceso químico complejo que utiliza el cuerpo para el funcionamiento normal y el mantenimiento de la vida, incluida la descomposición de alimentos y bebidas en energía y la construcción o reparación del cuerpo.

Hay dos procesos químicos que tienen lugar para que ocurra el metabolismo, uno es el catabolismo y el otro es el anabolismo, que están regulados para permanecer en equilibrio.

El catabolismo es el proceso en el que la comida y la bebida se descomponen en formas más simples, lo que da como resultado la liberación de energía.

El anabolismo es el proceso en el que la energía se utiliza para funciones corporales, incluido el crecimiento y la reparación de células en su cuerpo.

Aquí una aclaración, si la energía no se utiliza, el organismo la guarda como grasa hasta que llegue el momento que la necesite. Fuente 

Metabolismo rápido y Metabolismo lento

Cuando se hace referencia a un metabolismo lento o rápido estamos hablando de la tasa metabólica, que es la velocidad con la que el cuerpo utiliza la energía para funcionar.

Alguien con un metabolismo rápido quema muchas calorías incluso estando en reposo; por el contrario, si tiene un metabolismo lento su cuerpo necesita menos calorías para seguir funcionando.

Un metabolismo rápido no conduce necesariamente a la delgadez; hay estudios que demuestran que las personas con sobrepeso/obesidad a menudo tienen un metabolismo rápido, sus cuerpos necesitan más energía para mantener las funciones corporales básicas.

Son varios los factores pueden afectar el funcionamiento del metabolismo, entre ellos tenemos:

Masa muscular: se necesita más energía (calorías) para desarrollar y mantener los músculos que la grasa. Las personas con más masa muscular suelen tener metabolismos más rápidos que queman más calorías.

Edad: pierdes músculo a medida que envejeces, lo que ralentiza el metabolismo.

Sexo: Los machos tienden a tener metabolismos más rápidos que las hembras. Tienen más masa muscular, huesos más grandes y menos grasa corporal.

Genes: los genes que heredas de tus padres juegan un papel en el tamaño de tus músculos y en tu capacidad para desarrollar masa muscular.

Actividad física: Caminar, perseguir a tus hijos, jugar tenis y otras formas de ejercicio hacen que tu cuerpo queme más calorías que siendo sedentario.

Fumar: la nicotina acelera su metabolismo, por lo que quema más calorías. Esta es una de las razones por las que las personas que dejan de fumar pueden aumentar de peso. Pero las consecuencias para la salud de fumar (cáncer, presión arterial alta, enfermedad de las arterias coronarias) superan con creces cualquier beneficio que pueda obtener al quemar algunas calorías adicionales. Fuente

Sumado a los factores mencionados pueden presentarse algunos problemas de salud que generen que el metabolismo se ralentice, hablamos de:

Problemas de tiroides, la tiroides regula la energía del cuerpo, cuanta más tiroxina produzca la glándula tiroides de una persona, mayor será su tasa metabólica basal. No obstante, cuando hay deficiencias en el funcionamiento de ésta puede generar hipotiroidismo y como consecuencia un metabolismo lento que da lugar al sobrepeso.

Intolerancias alimenticias, ser intolerantes a algún alimento, puede generar tener una mala digestión y que el metabolismo funcione más lento de lo normal.

Determinados medicamentos pueden ralentizar su metabolismo, incluyen varios antidepresivos y ciertos antipsicóticos que se usan para tratar la esquizofrenia, también tenemos los que reducen el ritmo cardíaco que pueden provocar ese efecto. Para entender esto debemos pensar por ejemplo en el efecto de los medicamentos en la flora bacteriana.

El estrés crónico también afecta el metabolismo en la medida en que el cuerpo esta produciendo constantemente cortisol, lo que lleva a desajustes en el uso de la insulina y provoca aumentos de peso. Fuente

Asimismo, dormir poco enlentece el metabolismo. Fuente

Una mala dieta con exceso de azúcar, la presencia del hongo cándida, resistencia a la insulina, exceso de grasa visceral y alteraciones en la flora intestinal también enlentecen el metabolismo; sin olvidarnos del hecho de que el metabolismo se vuelve lento con la edad ante una disminución en la producción de la hormona del crecimiento.

Ayuno Intermitente y Metabolismo

En principio puede cuestionarse la practica del ayuno intermitente si uno desea que el metabolismo no se ralentice y esto es debido a que, al no comer, el cuerpo entiende que debe guardar energía y por lo tanto el metabolismo puede regularse a la baja.

Sin embargo, eso no tiene que ser tan así y hay pruebas de ello…

“El ayuno intermitente, también conocido como alimentación restringida en el tiempo, ha sido algo efectivo en la pérdida de peso. Se propone que el ayuno intermitente afecta los ritmos circadianos humanos, los patrones de sueño, los comportamientos de estilo de vida y la microflora intestinal. Los regímenes de alimentación que restringen o excluyen los patrones de alimentación nocturna que conducen a largos intervalos de ayuno pueden mejorar la salud metabólica.” Fuente 

Una buena forma de entender cómo el ayuno puede influir favorablemente en el metabolismo es haciendo referencia a la flexibilidad metabólica, es decir, la capacidad del cuerpo para “cambiar” entre el metabolismo de carbohidratos y la oxidación de grasas, con relativa facilidad.

Esa flexibilidad permitirá a una persona utilizar la energía de dos fuentes, por un lado, la proveniente de la ingesta de alimentos y por otro la de la grasa acumulada.

El ayuno intermitente promueve la flexibilidad metabólica al igual que lo hace el ejercicio, esto se entiende si comprendemos el proceso de cómo actúa el organismo cuando ingerimos o no alimentos.

Después de comer los niveles de insulina aumentan debido a la comida que acabas de consumir. La insulina es determinante a la hora de definir qué fuente de combustible va a utilizar el cuerpo; por ello, si los niveles de insulina son bajos, tu cuerpo va a quemar grasas principalmente, por el contrario, si los niveles de insulina son altos, el cuerpo quema principalmente carbohidratos y almacena grasa.

Entonces, cuando no ingerimos alimentos, la insulina baja y por lo tanto la energía de la que se vale el metabolismo es obtenida de las grasas.

Al igual que el AI, el ejercicio es una de las formas de mejorar tu flexibilidad metabólica y es una forma segura de impulsar al cuerpo a un modo de quema de grasa y si varias el tipo de entrenamiento que realizas (entrenamiento de fuerza, intervalos y algún tipo de actividad aeróbica o de resistencia) podría ser mejor para utilizar las reservas de grasa.

Es bueno saber que un poco de cardio de alta intensidad con poco o nada de glucógeno almacenado gracias al periodo de ayuno, puedes entrenar tu metabolismo para ser más flexible.

Aquí un detalle, si una persona no tiene flexibilidad metabólica es probable que en los periodos de ayuno su cuerpo se sienta sin energía ya que está acostumbrado a valerse únicamente de la energía de la comida.

Por eso es bueno entrenar al cuerpo a pasar periodos más largos sin comer y aprender a utilizar la grasa corporal, recuerda que el ayuno intermitente puede implementarse de forma progresiva, comienza con 8 horas que son las que utilizas para dormir, luego continua con 10, 12, 14, 16, con el tiempo vas a notar la diferencia.

Por otro lado, es importante considerar la Hormona del Crecimiento (GH), el metabolismo y el AI.

Un estudio afirma que “La hormona del crecimiento humano (Growth Hormone o GH) es una sustancia que regula el metabolismo y el crecimiento del cuerpo. La glándula pituitaria, ubicada en la base del cerebro, produce la GH. Esta hormona ayuda a los niños a aumentar de estatura (también llamado crecimiento lineal), aumenta la masa muscular y disminuye la grasa corporal. Tanto en niños y adultos, la GH ayuda a controlar el metabolismo del cuerpo, que es el proceso por el cual las células convierten la comida en energía y producen otras sustancias que el cuerpo necesita”.

Con los años la producción de GH es cada vez menor, lo observamos en el tono muscular de un adulto mayor, por ejemplo, más si esta persona no realiza ejercicios.

Aquí es donde aparece el Ayuno Intermitente, una herramienta que estimula la producción de la GH, encuentra detalles aquí.

Tampoco podemos dejar de hacer mención de que la resistencia a la insulina también afecta al metabolismo y lo enlentece, un punto en el que el AI puede ser útil a la hora de controlarlo y hasta revertirlo.

Igualmente, la grasa visceral puede alterar el metabolismo, en presencia de hígado graso se hace difícil la metabolización de los nutrientes que se consumen, además se dificulta la eliminación de las toxinas. Un tema que también puede mejorar con practicas de ayuno intermitente adecuadas.

Por último, señalamos el rol del ayuno a favor de mejorar condiciones que pueden afectar el metabolismo como por ejemplo la promoción de la diversidad de la de la flora bacteriana que puede verse afectada si se consumen medicamentos; su efecto en relación con los problemas de tiroides; etc.

Antes de finalizar, es bueno siempre recordar que el AI deberá ser implementado con la asistencia de un especialista que ayude a elegir el protocolo adecuado y adaptado a las condiciones de salud de la persona que elige practicarlo.


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